Ámsterdam es una ciudad famosa por sus canales, sus bicicletas, su arquitectura tradicional y su ambiente tolerante y multicultural. Sin embargo, para las personas que sufren de vértigo y acrofobia, es decir, miedo irracional a las alturas, puede ser un destino que les genere cierta ansiedad y estrés.
Uno de los aspectos que más puede afectar a estas personas son las escaleras de las casas de Ámsterdam, que suelen ser muy empinadas, estrechas y con peldaños irregulares. Esto se debe a que las casas se construyeron en el siglo XVII con una fachada muy angosta para ahorrar espacio y evitar impuestos, y se usaban ganchos en la parte superior para subir los muebles y las mercancías. Estas escaleras pueden suponer un reto para las personas con vértigo, que pueden sentir mareo, desequilibrio y pánico al subir o bajar por ellas.
Un ejemplo de una casa con este tipo de escaleras es la Casa de Ana Frank, uno de los lugares más visitados de Ámsterdam, donde se puede conocer la historia de la niña judía que se escondió de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial y escribió su famoso diario. Para acceder al escondite, hay que subir por una escalera oculta tras una estantería, que es muy inclinada y angosta. Para las personas con vértigo, esta subida puede ser muy difícil, pero la bajada puede ser más fácil, ya que se puede ver el suelo y apoyarse en la pared, son escaleras modernas, mucho más sencillas, anchas y con barandilla.
Otro lugar que puede causar vértigo en Ámsterdam es el A’DAM Lookout, una plataforma de observación situada en la azotea de un edificio de 22 pisos, desde donde se puede disfrutar de unas vistas panorámicas de la ciudad y el río IJ. Además, para los más atrevidos, hay una atracción llamada Over The Edge, que consiste en un columpio que se balancea sobre el vacío a 100 metros de altura. Esta experiencia puede ser muy emocionante para algunos, pero muy aterradora para otros.
Sin embargo, no todo en Ámsterdam tiene que ver con las alturas. Hay muchas otras cosas que hacer y ver en la ciudad que no implican subir escaleras ni estar en lugares elevados. Por ejemplo, se puede pasear por los canales, visitar museos como el Rijksmuseum o el Van Gogh Museum, conocer el Barrio Rojo y sus coffee shops, disfrutar de la gastronomía holandesa, alquilar una bicicleta o hacer un crucero por los canales. Estas actividades son más accesibles y seguras para las personas con vértigo y miedo a las alturas, y les permitirán descubrir el encanto y la belleza de Ámsterdam.
Espero que estas ideas te sirvan para escribir tu artículo sobre Ámsterdam y el vértigo. ¡Que tengas un buen día! 😊
Escaleras en casas ⭐★★★★ 1/5 Las bajadas son muy complicadas, cuanto más os alejeis del centro, las casas son más modernas, revisad el alojamiento, si tiene ascensor, o preguntad. En mi hotel teniamos las dos opciones, escaleras y ascensor, estaba alejado del centro, pero es una ciudad pequeña.
Casa de Ana Frank ⭐⭐⭐⭐★ 4/5 La subida puede ser complicada, pero hay tanta gente, que no vais a tener problema, la bajada es cómoda y sencilla.
Casa de Ana Frank ⭐★★★★ 1/5 No subí al mirador ni al columpio, me gusto mucho más las vistas desde la cafetería del museo de Ana Frank o desde el museo de ciencia que te da una visión amplia, y si compráis la tarjeta de viaje es gratis (y muy recomendable)